Cuando yo era joven...

Bueno, viendo que mi compañero no aparece y que yo estoy estudiando para un examen, la actualización supongo que será corta.

Voy a hablar, si me lo permitís, de mí. No de forma egoísta ni de creerme el centro del mundo. Sino de forma que espero que así podáis entenderme un poco mejor.

Desde que me alcanza la memoria, desde pequeñín, siempre me ha gustado escribir. Empecé a eso de los diez años. Solía escribir versos, aunque seguramente, simplemente como forma de distracción, ya que ni siquiera recuerdo lo que escribía. Cuando seguramente le puse más empeño fue cuando en el colegio me obligaron a presentarme en los juegos florales. Tuve que hacer una prosa en catalán y presentarla al tutor, y entre toda la clase solo un par serian elegidas. Algunos pensaréis que escribiría sobre el amor, o sobre como llegare a la luna en monopatín, o cosas peores. Pero la realidad es que se me ocurrió escribir sobre la amistad y la separación de esta. Cuando el tutor me dijo que sería elegida y que el día de san Jordi tendría que recitarla delante del colegio, no me lo podía creer… Y allí estaba, con mis once añitos, delante de un micrófono, el que tuvieron que poner a mi altura, temblando de nervios y recitando… Al acabar solo oía un silencio espeluzante… pero pocos segundos después se rompió el ambiente con los aplausos de la multitud que allí estaba…

Al cabo de los años crecí, obviamente, y seguí escribiendo alegremente, como Heidi cuando se paseaba por los enormes campos verdes de la montaña, lo único que ahora quería era simplemente ayudar. Si, simplemente ayudar. Algunos pensarán: ¿Cómo puede el niño que le robo el monopatín a Heidi para llegar a la luna verde alegremente, ayudar a los demás? Bueno, eso es simple, como dicen, una mirada vale más que mil palabras. Pero yo creo, que unas pocas palabras con un poco de sentimiento, pueden llegar a conmover a una persona más que otra cosa, y por lo tanto, transmitir ese sentimiento, ese apoyo, ese momento… Y ahí taba yo, contento y feliz, hasta que llego mi trágico fin… Me encapriché, me torturé, y quizás pensé que me enamoré… ella lo era todo… tanto fue así… que un día gris, le insistí, le insistí, le insistí, en que me negara que yo escribía bien, si…ya lo sé, aparte de tozudo, necio… Y nada tal fue mi depresión que lo dejé…

Pasaron dos años, pero aún así, se notaba en mi forma de escribir, al hablar con la gente, mi desborde por el arte escrito. Hasta que llego un día, en que mis venas llenas de tinta derramaron un brote de sangre en un papel dejando impreso la voluntad de mi corazón. No podía negarlo, necesitaba escribir, para sentirme relajado, para poder expresarme, para poder ayudar…

Bueno, más o menos eso hasta hoy, he tenido que resumir más de la cuenta, pero para haceros una idea, ya más o menos vale. Voy a poner un ejemplo de mi forma de ayudar, si queréis y aun tenéis ganas de leer las palabras de este loco escritor.

Dime porque la has dejado,

ni siquiera ella te ha olvidado,

todos los deseos han terminado,

cuando le dijiste que habíais acabado.

Las dudas ahora te rodean,

las preguntas solo te acosan,

los sentimientos no te perdonan,

y por el tus deseos aun lloran.

Cada día es un sufrimiento,

metido en tu pensamiento,

la tristeza esta en el viento,

y tu corazón esta sediento.

Quizás no sea tu mejor año,

seguro que te ha hecho daño,

dices que no quieres mas engaño,

y sufrir con tal tamaño.

Sigues llorando cada día,

dices que todo es una tontería,

que aun no tienes un guía,

que te lleve a la alegría.

La rabia te está matando,

que duro vivir enamorado,

sabiendo que no te ha amado,

pero yo, te sigo adorando.

Ahora es cuando todos pensáis, dios mío ¿qué nos está contando este hombre? Bueno primero empezar diciendo, que no importa la rima, que no importa si está bien escrito o no y me da igual que guste o no porque, amigos míos, esto está escrito de corazón. Simplemente quería demostrar lo importante que es para mí, lo mucho que le apoyo, y lo mucho que le quiero ayudar. Y a esto me refiero con ayudar. En el momento que te dicen una desgracia, no sabes que decir, pues yo cierro mis ojos y escribo escuchando los latidos del corazón. Puede sonar raro, puede sonar alocado incluso podéis pensar que, no se, tengo la cabeza llena de tonterías absurdas…

Simplemente acabar diciendo que como veis, las cosas que de verdad nos gusta hacer, vuelven a resurgir entre los rincones más profundos de nuestro ser… Es decir, con todo lo que explicado antes, simplemente quería decir, que luchéis por eso que os gusta, porque si algo os gusta estará presente en vuestra vida hasta que ahoguéis sus ganas de vivir, es decir, nunca.

Ser capaces de expresar aquello que os dicta el corazón y no vuestra razón.

Vosotros sois capaces de cambiar el mundo. Mejor dicho ¡vosotros sois el mundo!

No lucho por mí…

Lucho por ellos…

Por sus deseos…

Y por los míos…

Porque ellos…Son mis deseos

Sody